El alfombrismo me ha dado la oportunidad de romper mis límites y explorar nuevos retos. Reconocer nuestras capacidades, aprender a compartir, atreverse a crear y confiar en el colectivo son algunas de las experiencias que me han hecho crecer.
Con mucha alegría y motivación participo en cada una de las obras, con la convicción que haremos un gran trabajo y sobre todo que al terminar nos transformamos en mejores seres humanos.